- 1 ½ repollo grande
- 1 libra de masa de cerdo picadita
- 1 libra de cadera de res picadita
- 2 ½ tazas de arroz lavado
- 6 tomates Barceló picaditos sin piel
- 2 dientes de ajo majados
- 2 ½ cucharadas de pasta de tomates
- Jugo de ½ limón
- Aceite de oliva
- Aceite de canola
- Sal
- Ruedas de cebolla
Preparación
Lo ideal es que el repollo no sea pesado y esté flojo al momento de comprarlo. Pon en un caldero grande el repollo entero cubierto con agua. A medida que se vayan ablandando las hojas, ve removiéndolas del repollo. Corta con un cuchillo la parte dura de las hojas de repollo y reserva. Divide las hojas en 2 partes.
Pica las carnes reservando la grasa y masajéalas con las manos sucias de la sazón del relleno para que vayan cogiendo sabor.
Para el relleno; mezcla en un bowl las carnes y sazona con el ajo y un poco de sal. Agrega el arroz, un tomate picadito desbaratándolo con las manos, jugo de limón, pasta de tomate, aceite de canola y un poquitico de aceite de oliva. Mezcla bien y rectifica de sal.
Pon en el fondo de un caldero grande un poco de sal, luego cubre el fondo con las hojas feas y pedazos de tallo que quedaron del repollo, agrega un chorrito de aceite y añade un poco de los tomates picaditos que previamente le habrás puesto un poco de sal. Haz los niños envueltos bien apretaditos y ve colocándolos en el caldero, cuando cubras la primera capa, pon por encima un poco de sal, tomaticos, un poco de agua sazonada con un chin de pasta de tomates y aceite de oliva. Repite el procedimiento hasta completar todas las hojas de repollo. En la capa del medio pon la grasa de la carne que habíamos reservado, junto con huesos de cerdo alrededor. Coloca por encima los tomaticos restantes y cebolla blanca en ruedas. Cubre los repollitos con agua que previamente tenías hirviendo con un poco de sal, hasta que los repollitos medio floten en el agua. Pon a hervir a fuego medio por aproximadamente 2 horas. Si queda desabrido, puedes poner a hervir un poco mas de agua con sal y agregárselo.
Margarita Camasta, cariñosamente “Abuela Rita”, es la mamá de los mejores amigos de mi papá y prácticamente como una abuela más para mí. Es sumamente difícil sacarle sus recetas, ¡nadie hace mejor la comida árabe! Y les cuento que tuve que meterme con ella a la cocina, para que no me vaya a dejar sin algún detalle. Igual creo que en algún momento me distraje, porque todavía no me quedan como a ella (Jajaja). Espero que no se ponga guapa conmigo por compartirla con ustedes, aunque estos son aproximados que yo hice, pues ella cocina como todas las abuelas, al ojo por ciento.